miércoles, 26 de febrero de 2014

ZENITH PILOT MONTRE D’AÉRONEF TYPE 20 GMT 1903

Desde su fundación en 1865, la Manufactura Zenith aspira a todos los sueños y atrevimientos que convierten la utopía en realidad. Entre las aventuras humanas que han marcado su historia, hay una conquista que la marca ha acompañado desde sus albores a principios del siglo XX: la conquista del aire. Animada por el mismo espíritu que los hermanos Wright, que hicieron realidad el sueño de Ícaro, Zenith rinde homenaje a estos pioneros mediante un reloj lanzado en una serie limitada de 1.903 unidades: el reloj Montre d’Aéronef Type 20 GMT 1903.

FIEL COMPAÑERO DE LOS HEROES DEL CIELO DESDE PRINCIPIOS DEL SIGLO XX
Zenith fue una de las primeras Manufacturas en realizar instrumentos de vuelo para equipar, desde principios del siglo XX, los aviones y otros dirigibles pioneros que empezaron a surcar los aires. Reconocidos por su precisión y su robustez excepcional frente a las vibraciones, los campos magnéticos y las variaciones de la temperatura, los altímetros, relojes y cronógrafos de a bordo y de pulsera de Zenith tuvieron gran éxito entre los pilotos, a los que la marca de la estrella acompañó en sus proezas. En poco más de un siglo, Louis Blériot, Léon Morane o, más recientemente, Felix Baumgartner cumplieron su destino y entraron en la Historia con un Zenith en la muñeca o en el cuadro de mandos.



PILOT MONTRE D’AÉRONEF TYPE 20: UN MODELO LEGENDARIO
El Pilot Montre d’Aéronef Type 20, objeto de culto para los coleccionistas, participó en los días de gloria del Aéropostale (el servicio postal aéreo original francés) y, desde 1939, ha figurado en los cuadros de mando de numerosos aparatos, como por ejemplo los célebres aviones Caudron, destinados al entrenamiento de los pilotos del Ejército francés. Así pues, ¿quién mejor que esta leyenda de los aires para inspirar un reloj creado en homenaje a los hermanos Wright? El modelo Pilot Montre d’Aéronef Type 20 GMT 1903 toma su inspiración de este glorioso pasado y cuenta con una caja ultraligera pese a sus 48 mm de diámetro, hazaña que consigue gracias al uso de titanio tratado con revestimiento de DLC negro. La corona, un elemento emblemático de los antiguos relojes de aviador, cuenta con unas muescas que permiten su fácil manipulación, incluso con guantes de piloto. La esfera, de color negro mate y arenada cinco veces, reproduce los generosos números arábigos originales para ofrecer una legibilidad perfecta tanto de día como de noche. Estos relojes con un delicioso encanto retro son luminiscentes gracias a la aplicación de un primer tratamiento old radium y una segunda capa, más clásica, de Superluminova. El efecto es fascinante y el resultado único, puesto que esta ingeniosa combinación confiere al reloj un color crema con pequeños toques retro imposibles de reproducir de manera idéntica de una pieza a otra. De este modo, cada esfera es única, lo cual aumenta aún más la exclusividad de esta edición limitada de 1.903 unidades, en la que cada ejemplar lleva un número individual situado en una pequeña placa atornillada en el lado del canto, como el remache de un avión. 


Partícipe de todos los sueños y aventuras, el modelo Pilot Montre d’Aéronef Type 20 GMT 1903 invita al viaje mediante un segundo huso horario, dirigido por un movimiento automático tan preciso como fiable: el calibre Elite 693. Delicadamente decorado con el motivo "Côtes de Genève", aunque resguardado de las miradas, este calibre mantiene imperturbablemente su cadencia de 28.800 alt./h y cuenta con una reserva de marcha de 50 horas. Bajo este elegante corazón mecánico, el fondo del reloj cuenta con un blasón estampado donde aparecen Orville Wright a bordo del "Flyer" y su hermano Wilbur corriendo por la playa de Kitty Hawk para seguir su proeza aquel 17 de diciembre de 1903. 

El modelo se completa con una robusta correa de ante beige. En la decoración estampada en caliente en el forro, los conocedores de la marca reconocerán la indicación "Zenith Flying Instruments", así como el blasón histórico de la marca, que resalta el espíritu de una época en la que los cielos aún estaban por conquistar.

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